*Esto ocurrió en 21 de diciembre, cuatro días antes de Navidad.
Hoy toca publicar algo.
Mira tú por dónde, antes de ayer Papá Noel se adelantó y me regaló un hater que me lo pone en bandeja.
Y encima con una autoridad como Marcos Vázquez, Fitness Revolucionario, de por medio.
Palabras mayores, vaya.
Empecemos por un artículo del blog.
Por su título, para ser exactos.
Fíjate bien en el título, por Dios.
Que lo del odiador no tiene desperdicio.
Es este (puedes ir al blog para leerlo, cuando acabemos con el odiador, claro):
Microentrenamientos (Microworkouts). ¿Es una moda? Mi opinión
¿Qué pasó en Instagram?
Quédate con el final del título: «Mi opinión».
Foco ahí.
El caso es que el lunes publiqué el artículo.
Y dio la casualidad de que Marcos, mi camarada desde hace años y con quien mantengo una excelente relación, el miércoles también publicó algo al respecto en la red social.
Y yo lo usé republicándolo en mis stories para apuntar que la idea “científicamente” es correcta (lo puse en mayúsculas), pero que por ciertos motivos para una gran mayoría de las personas no es ni será factible, aplicable, viable en lo cotidiano.
Para profundizar en ello, precisamente, enlazaba a mi artículo, donde me explayo y explico al detalle.
Y, entonces, emerge el odio:
«Con 260 seguidores tengo más feedback en una foto de mis ojos, que tu con 6000 y «en teoría» ayudas a estar mejor a la gente, eres un auténtico fraude y ya ha quedado más que demostrado, sabes, si te pones a criticar un post basado en estudios, a los cuales se te facilita el enlace a ellos, y tu crítica es un enlace directo a tu página, sin corroborarlo por ningún lado, no es más que tú opinión personal y deberías dejarlo claro, preguntate por qué solo un 1% interactúa contigo a través de esta cuenta».
Bien.
Vamos a quedarnos con una cosa.
El resto también tiene chicha, pero no lo usaremos.
O sí. Quién sabe.
Que yo siempre voy sobre la marcha, como cualquier persona mediocre, normal.
Pero primero esto:
«No es más que tu opinión y deberías dejarlo claro».
Mmm…
¿Hola?
¿Hay alguien ahí?
Recuerdo, por última vez, el final del título: «Mi opinión».
Este es el nivel.
Por no hablar de:
- El tono.
- El insulto enmascarado con lo de fraude.
- La confusión con las métricas en redes sociales –esto lo aprendí del gran Isra Bravo; como esa peña con un millón de seguidores que no llegan a fin de mes y gente que no tiene ni red social, como el propio Isra, y factura más de 1M de euros al año…
- La ortografía y tal…
- Y otras cosas que podría concluir de seguir rascando.
¡Pero!
Pero la lección más importante es esta:
Daniel, que así se llamaba el tipo, parece que “sabe” leer.
Quiero decir:
Daniel “sabe” leer porque sabe enlazar unas letras con otras para formar palabras que, a su vez, forman oraciones que Daniel parece que lee.
Luego, sigue el mismo proceso para escribir.
Total, que parece que Daniel “sabe” leer y escribir.
¡Pero!
Pero creo que todos estaremos de acuerdo en que no SABE.
Ni leer ni escribir.
¡Justo igual que con lo del fraude del ejercicio!
Porque, bueno, ya sabes (guiño).
Puedes «hacer ejercicio» y estar muy fit y parecer, aparentar que «sabes», que comprendes y puedes usar de verdad tu cuerpo para comunicarte y moverte y tal pero…
Saber saber…
Saber de verdad, quiero decir.
Con lo bonito, lo chulo que es, encima.
Y no el sopor ese de repetir 40 años hasta que te mueras my tailor is rich, my tailor is rich, my tailor is rich, my tailor is rich…
Que luego cuando vas a Inglaterra no te sirve para una caca.
Para saber sobre todo mucho más de ti y de tu cuerpo en movimiento, y salir del escaparate de las apariencias, es aquí:
Cursos del Laboratorio de Movimiento
Rober
PD: le respondí esto -> «me encanta. Aprovecho para desearte Buenas Fiestas. De verdad, muy sinceramente, te deseo lo mejor».
Y lo decía en serio.
¿Qué otra cosa podía hacer?
Desconozco su contexto para comportarse así.
No le daremos más vueltas.
Porque además me regalaba una idea cojonuda para un email.
Gracias, Daniel.
PD2: después, por privado, con Marcos comentábamos la jugada. Si yo con 6000 seguidores recibo esto, imagínate Marcos con más de medio millón.
PD3: para darle un buen regalo a tu cuerpo, aprovecha el desliz y las lecciones de Daniel.
En el enlace.