Todos los hábitos y prácticas que valen la pena encierran los mismos “secretos”.
Moverse mejor no es una excepción.
A veces escribo basura. Seguramente te has dado cuenta.
Si piensas que cada vez que abres mis correos vas a leer algo brillante, te llevarás una decepción.
Igual que si crees que siempre tenemos que estar de acuerdo con lo que escribo.
Ni yo mismo lo estoy -conmigo mismo.
Practicar un buen hábito, conscientemente, con un propósito y del que puedas aprender algo en cada una de las prácticas, pasa justo por eso.
Por habituarte al hábito de ver, de sentir, de experimentar que tu práctica es mediocre.
Y si no lo haces, si no te pasa, te estás perdiendo probablemente la mejor parte del juego, donde tienes más que aprender, donde está la chicha.
Entonces, ya no es una cuestión de hacerlo bien, de si eres bueno.
Sino de hacerlo.
Intentar aprender algo, un matiz, un detalle.
Para pulirlo, para mejorarlo.
Mejorarlo como práctica de hacerlo mejor, o de moverte mejor.
Pero no para ser mejor.
Sino para practicarlo.
Y persistir.
Una manera casi infinita de moverte mejor y aprenderlo y practicarlo y habituarte la enseño en este curso:
Locomociones – Desarrolla un cuerpo hábil y muévete con inteligencia
Rober
PD: Y persistir. En el enlace.