Cuando piensas en actividad física y movimiento, hay cosas sobre los músculos que son importantes conocer.
No se suele pensar sobre ellas y si lo hicieras te ahorrarías un montón de problemas.
Te cuento:
A ver, tampoco se trata de ser un lumbreras ni alguien que sepa tanto como un licenciado en ciencias de la actividad física y el deporte o un fisioterapeuta.
El saber no ocupa lugar (o sí), pero lo de los miocitos y los filamentos de actina y el ciclo de Krebs y blablablá no es necesario para moverse mejor.
En cambio, hay otras cosas que sí creo que vale la pena conocer, en plan culturilla general.
Por ejemplo, qué son una contracción excéntrica, concéntrica o isométrica.
De qué manera influye el tempo de un ejercicio en cada una de sus fases, incluidas las pausas.
O los matices que diferencian el desarrollo de la resistencia, la elasticidad, la explosividad o incluso la “soltura”, la capacidad de relajación.
¿Por qué es importante todo esto?
Dependiendo de cómo te estés moviendo estarás solicitando a tus músculos que actúen de una manera u otra, les estarás exponiendo a un estímulo concreto y demandándoles una respuesta precisa.
Y ellos se adaptarán específicamente a tus “exigencias”.
Luego vienen los problemas.
¿Te imaginas que por desconocimiento tú estás estimulando a tus músculos de una forma para las que esas adaptaciones no cuadran, no son coherentes con las expectativas, los resultados o los propósitos que tienes?
Eso significaría que estás perdiendo el tiempo y la energía, y probablemente después la motivación.
No sé, por ejemplo, imagínate que tú haces ejercicio para sentirte bien y ágil y de paso relajarte, por así decirlo, pero tu enfoque hace que cada vez estés más como una piedra.
Por eso, ante cualquier práctica, ejercicio o estímulo, siempre siempre siempre debes preguntarte para qué lo estás haciendo de la forma que lo estás haciendo.
Para qué te mueves como te mueves.
¡Ojo!
Que en realidad para ti esto no es un problema, siempre y cuando estés aquí para moverte mejor.
Todo eso es importante, pero no lo más importante.
Mira.
Esta es la comprensión más importante:
Si lo que practicas es moverte mejor, moverte de verdad, explorando diferentes direcciones impregnadas de diversidad y complejidad, los estímulos son… ¿diversos?
Y entonces los músculos pues como que se preocupan de sí mismos, que ya son mayorcitos, y se van adaptando a esto y a aquello, así y asá, equilibradamente.
Vamos, como durante toda la historia de la humanidad hasta hace, no sé, ¿cien años?
Una preocupación menos para ti.
Una forma de dejar que los músculos hagan lo que tengan que hacer, moverte mejor y disfrutar de las múltiples consecuencias,
entre ellas vivir sin “preocupaciones musculares”,
te la enseño y la practicas en este curso:
Locomociones – Desarrolla un cuerpo hábil y muévete con inteligencia
Rober
PD: ni un solo nombre de ni un solo músculo y te pones como un toro, sobre todo a nivel de piernas y centro corporal. En el enlace.