Qué opino del Body Combat, spinning, aerobic, yoga, Pilates y el resto de las actividades dirigidas

La semana pasada un suscriptor de la lista de correo, Julián, me preguntaba esto amablemente:

«Rober, ¿qué te parece como actividad de movimiento el Body Combat?».

Hoy yo me dispongo a responderle, también amablemente.

Y además, aprovechando su duda, ampliaré mi respuesta a todas las actividades dirigidas.

Así mato varios pájaros de un tiro y cada vez que alguien me pregunte, le envío el enlace y listos.

Pues eso:

Da igual si es Body Combat, Body Balance, Body Barre, spinning, aerobic, Zumba, etc.

Incluso yoga, Pilates, Crossfit, boxeo, entrenamiento “funcional”.

Lo que voy a explicar sirve para cualquier actividad dirigida que consista específicamente en entrar en una sala, unirse a un grupo, imitar lo que haga el instructor y/u obedecer sus pautas, y marcharse a casa.

(Por lo tanto, antes de tomártelo como algo personal / disciplinar, atiende a los matices).

Lo dividiremos en cuatro partes:

  • Qué pasa. Metafóricamente.
  • Dos preguntas con más chicha.
  • Mi opinión.
  • En resumen y en francés.

QUÉ PASA. METAFÓRICAMENTE

Vamos a suponer que saber idiomas es bueno para la salud.

De hecho, estoy convencido de que es la mar de saludable.

Y, aunque no lo he comprobado, también estoy seguro de que algún iluminado lo habrá estudiado y demostrado científicamente gracias a una subvención pública.

Ni que sea para justificar más inversiones en algo tan “necesario”, en lugar de destinarlo directamente a intervenciones en salud pública, y seguir engordando las arcas del lobby de la industria de los estudios científicos –pero no vamos a entrar ahí, que es otro tema.

En este sentido, ya que hablamos de opinión, a mi parecer no hace falta estudiar nada para comprender que saber idiomas va fenomenal para la salud.

Pero vaya, sigamos con el “cuento” y la imaginación.

Supongamos que alguien lo ha demostrado y que saber idiomas es bueno para la salud.

Y que durante años te lo dicen los telediarios, las marcas, los expertos, los anuncios y los ayuntamientos.

Que te interesa saber idiomas porque es muy saludable y estarás más sano.

¿Por qué?

Porque potencia la plasticidad de tus neuronas, hace que quemes glucosa en el cerebro y promueve que tus mitocondrias se tornen más eficaces.

(¿Acaso estoy mintiendo?).

Fíjate en una cosa:

Saber idiomas puede alimentar tu curiosidad por otras culturas, multiplicar tu conexión social con un buen puñado de personas y, en definitiva, ser una posibilidad más para enriquecer tu experiencia/existencia y DISFRUTAR mucho más de la vida.

Pero en eso no insisten.

Insisten en lo de la salud y lo “neuro” y las calorías y las mitocondrias.

Todo es un suponer, claro.

Pero partiremos de ahí.

Saber idiomas es bueno para tu salud.

Entonces…

Vas tú y te apuntas a un sitio donde la gente HACE idiomas.

Ojo con el verbo que he utilizado, en mayúscula y cursiva.

(Conéctalo con hago Body Combat, hago yoga, hago Pilates, hago boxeo, hago spinning…).

Decía que te apuntas en el sitio.

Y entras en esas instalaciones.

Y ves varias clases de idiomas.

Clase de chino. Clase de alemán. Clase de francés. Clase de mongol.

Entras en la clase de francés.

Porque te han dicho que es lo más factible, de primeras.

Y, para qué engañarnos, porque la profe es la que está más buena de todas.

Y te dispones a HACER francés durante una horita.

(Con chumba chumba de fondo, por cierto, que también debe ser muy saludable porque todo el mundo sabe que te fríe el cerebro… perdón… que te «neuroestimula» más, y a tus mitocondrias ni te digo).

A partir de ahí, todo es sencillo –no sea que te hernies mentalmente.

Solo tienes que hacer una cosa:

Imitar a la profe de francés.

Primera canción.

Si vous voulez.

Si vous voulez.

Si vous voulez.

Si vous voulez.

Si vous voulez.

Si vous voulez.

Si vous voulez.

Así, repitiendo estas tres palabras, durante tres minutos y medio.

Chumba chumba.

Sudando la gota gorda.

Segunda canción.

Apprendre le français.

Apprendre le français.

Apprendre le français.

Apprendre le français.

Apprendre le français.

Apprendre le français.

Apprendre le français.

Tú, en realidad, no te enteras de nada.

Pero te esfuerzas y cumples, disciplinadamente.

Que esto es muy bueno para la salud.

Otros tres minutos y pico.

Tercer tema.

Ce cours ne sert à rien.

Ya sabes la dinámica, así que no la repito.

Reiteración y monotonía a tutiplén.

Tú, más perdido que un pedo en un jacuzzi.

Otros tres minutitos dale que te pego.

¡Yeeeeiiiii!

El mejor momento de la clase.

¡¡Vamos a hacer una coreo!!

Unámoslo todo.

Si vous voulez apprendre le français, ce cours ne sert à rien.

Venga, otra vez.

Si vous voulez apprendre le français, ce cours ne sert à rien.

¡Una más, chiques!

Si vous voulez apprendre le français, ce cours ne sert à rien.

¡¡Vamoooooosssss!!

Si vous voulez apprendre le français, ce cours ne sert à rien.

La últimaaaa… ¡A topeeeeeee!

Si vous voulez apprendre le français, ce cours ne sert à rien.

Si vous voulez apprendre le français, ce cours ne sert à rien.

Si vous voulez apprendre le français, ce cours ne sert à rien.

Uau.

Qué pasada, ¿no?

Cómo he sudado.

Me quema todo.

Esto de HACER francés es brutal.

(Y qué buena está la Jessi, por cierto).

Voy a venir tres días a la semana, fijo.

AHORA…

No tengo ni puñetera idea de lo que quiere decir eso que he repetido cientos de veces.

O si se me entendía algo cuando lo gritaba yo.

¿Y francés?

¿Cómo?

¿Qué?

¿Cuálo?

DOS PREGUNTAS CON MÁS CHICHA

¿Soy consciente de lo que estoy haciendo, específicamente, y de qué me aportará, específicamente?

Porque cuando me meto en una clase de Body Combat, voy a llevarme una serie de “beneficios”, sí.

Igual que cuando me meto en una clase de spinning o de functional training.

O de yoga o Pilates o Feldenkrais o de ponleelnombrechachipiruliquequieras, y SOLO consiste en seguir una serie de instrucciones.

Esto nadie lo niega.

Pero…

¿Soy consciente de lo que me aportará una clase en grupo que solamente consiste en imitar a un instructor, le pongas el nombre que le pongas?

(Porque eso, el nombre, el qué, es lo de menos. Lo crucial es el cómo y el para qué).

Y otra pregunta más, ya introduciendo específicamente la pregunta de Julián.

(Quien, en realidad, si me pregunta a mí es porque intuye lo que voy a responder, digo yo…).

*Ojo con el condicional.

Si lo que me interesa es el marco del movimiento, ¿qué me está aportando dicha actividad en términos de movimiento?

Porque es muuuuuuy diferente, pero mucho mucho…

  • Hacer francés que aprender francés.
  • O hacer Body Combat que aprender un arte marcial.
  • O hacer Body Barre que aprender danza.
  • O hacer yoga que aprender yoga.
  • O hacer halterofilia que aprender halterofilia.
  • O hacer Pilates que aprender Pilates.

Hacer.

O practicar, involucrarte, profundizar, aprender.

Son cosas extremadamente distintas.

MI OPINIÓN

Después de lo que acabo de exponer, sinceramente, creo que mi opinión es absolutamente irrelevante.

Lo primordial es si miramos, de cerca y de lejos.

Si observamos, si comprendemos y si después, en base a ello, tomamos una decisión consciente y coherente con lo que buscamos.

Lo he dicho y lo diré mil veces.

El Body Combat, el spinning, el Zumba y todo lo demás que he nombrado en algún u otro momento de este artículo ni son “malos” ni tengo nada en contra de ellos.

Si hay algo en lo que me posiciono contrario (y diría que ni tan solo eso), es en la tendencia de hacer las cosas al tuntún, porque las hace todo el mundo, porque las recomiendan los expertos, porque son cómodas de aplicar, porque son “buenas” para la «salud o tal o cual cosa…

…sin pararnos a pensar si encajan, si cuadran con el propósito que podemos tener, o si tienen un sentido personal para nosotros.

Con todo, mi opinión es intrascendente.

Lo que importa es la tuya.

Pero ya que me la pides (y matizándolo a raíz de la pregunta de Julián):

  1. Si lo que quieres es ir a moverte un rato a las órdenes de vete a saber quién, te quieres quedar en la superficie, llevarte algunos beneficios de hacerlo y entretenerte en grupo porque te es más sencillo, o simplemente porque no buscas nada más, adelante con cualquier actividad dirigida, tenga el nombre que tenga.
  2. Si lo que quieres es comprender el movimiento, profundizar en el movimiento, involucrarte en el movimiento, ir un poquito más allá en el movimiento, practicar movimiento, aprender movimiento y hacerlo tuyo, darle tu toque personal al movimiento dentro de tu caja de herramientas de movimiento, así no funciona.

EN RESUMEN Y EN FRANCÉS

No es lo mismo una clase imitada, automatizada y superficial como la que acabo de describir, adornada con música y luces de colores y “tribu”, repitiendo hasta la extenuidad eso de:

Si vous voulez apprendre le français, ce cours ne sert à rien.

Que ponerte a estudiar en serio y aprender de verdad el puñetero francés, y comprender que:

Si quieres aprender francés, esta clase (chachipiruli) no sirve para nada.

*Y ahora es cuando alguien que sabe francés me escribe y me dice que la traducción es horrenda, ¡jajajaja! La culpa es de Google. Y mía, que soy un ignorant.

Espero que esto te haya aclarado las ideas.

O no.

La verdad es que no.

Siendo egoísta, espero que tengas dudas, que le des vueltas, que lo cuestiones, incluso que te duela un poquitín (con cariño).

Si todavía no estás suscrito en mi lista de correo, puedes hacerlo gratuitamente y acceder a 7 cursos de bienvenida del Laboratorio de Movimiento (te recomiendo empezar por CORE y JOINTS), mi plataforma de educación online de ¿ejercicio? No. De movimiento. En este enlace.

Que tengas un gran día,

Rober Sánchez

PD: si este artículo te ha resultado útil o inspirador de alguna manera, compártelo con tu gente. A ver si vamos cambiando un poco el chip del chumba chumba. Quien quiera. Claro. Gracias.